Se había armado dos “casitas” con todo lo necesario para sobrevivir.
Lo delató la basura. Un chico de 14 años estuvo viviendo durante cuatro días adentro de un supermercado Walmart de Texas, en Estados Unidos. Se había armado dos refugios: uno en la zona de comidas y el otro en la de artículos para bebés. Se cambiaba de ropa todos los días para no alertar a los empleados de su presencia. Según sus padres, el muchacho tenía un historial de huidas de su hogar.
En más de una oportunidad se había escondido en casas y comercios abandonados de Corsicana. Sólo que esta vez se lo tomó muy enserio: en los “refugios” del chico encontraron hasta pañales, que utilizaba para evitar ir al baño y ser detectado. Finalmente, los empleados del local descubrieron algunos rastros de comida que les permitieron dar con su escondite.
La policía dijo que ahora se encontraba bajo la atención de profesionales y que el chico no tenía un historial de abusos. Walmart decidió no presentar cargos en su contra por las cosas que el chico consumió.
Lo delató la basura. Un chico de 14 años estuvo viviendo durante cuatro días adentro de un supermercado Walmart de Texas, en Estados Unidos. Se había armado dos refugios: uno en la zona de comidas y el otro en la de artículos para bebés. Se cambiaba de ropa todos los días para no alertar a los empleados de su presencia. Según sus padres, el muchacho tenía un historial de huidas de su hogar.
En más de una oportunidad se había escondido en casas y comercios abandonados de Corsicana. Sólo que esta vez se lo tomó muy enserio: en los “refugios” del chico encontraron hasta pañales, que utilizaba para evitar ir al baño y ser detectado. Finalmente, los empleados del local descubrieron algunos rastros de comida que les permitieron dar con su escondite.
La policía dijo que ahora se encontraba bajo la atención de profesionales y que el chico no tenía un historial de abusos. Walmart decidió no presentar cargos en su contra por las cosas que el chico consumió.
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